En la antigua judería de Córdoba, rodeado por el enrevesado laberinto de callejuelas que abarrotan los alrededores de la mezquita, fuí invitado a subir al escenario de un emblemático local de jazz para tocar algunos temas. Esta fue la primera pieza que elegí... una de las primeras que aprendí a tocar cuando era niño... y sin duda una de las más apropiadas para la mágica atmósfera que envuelve la ciudad...
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